Praça Alípio Carvalho

PLAZA ALÍPIO CARVALHO

Los pueblos suelen crecer alrededor de una plaza con una iglesia y aquí en Carolina no es diferente. El corazón de la ciudad -al menos en el área urbana- está aquí. Aquí también encontrarás un Centro de Atención al Turista (CAT) con información más detallada.

Foto: Wikipedia / Reproducción

Los primeros exploradores llegaron siglos antes a la región del río Tocantins. Pero la historia de Carolina reserva un capítulo importante para Alípio Alcides de Carvalho y Rosa Sardinha Guimarães Carvalho, quienes llegaron en octubre de 1880, cuando Brasil aún era un imperio. Ese año, los dos se casaron.

Al año siguiente, Alipio se vio afectado por una enfermedad llamada beriberi, deficiencia de vitamina B1. Se le aconsejó trasladarse al interior de Maranhão.

Eligió a Carolina por su posición geográfica, en la margen navegable del río Tocantins. La región es rica en frutas y tiene un clima agradable. ¡Funcionó tan bien que nunca se fue de aquí! Esto fue solo el comienzo. Republicano, Alipio luchó contra la esclavitud. Liberó a quienes estaban conectados con él mucho antes de la Ley Dorada.

Foto: Reproducción

ALIPIO, UN VISIONARIO

Al organizar la ciudad, pensó en el equilibrio entre la naturaleza y el crecimiento. Como profesional, pasó de la ganadería a la farmacia, manipulando medicamentos y realizando cirugías menores utilizando tratados médicos en francés y alemán. Además, escritor, poeta y músico.

Además del nombre, tiene marcas de la pareja Alípio y Rosa hasta hoy en los alrededores. Ellos fueron los que sembraron los 12 árboles de mango en la Av. Getulio Vargas. Las Palmas Imperiales plantadas aquí también son obra suya. Para mantener la distancia perfecta, en ese momento, usaron una cuerda.